The RQS Blog

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By Luke Sholl


Hay muchas formas innovadoras de disfrutar de la marihuana, y los comestibles son una de nuestras favoritas. Hemos hecho un resumen de los errores más comunes que hay que evitar, para que puedas preparar comestibles potentes y deliciosos.

1. COCINAR CON MARIHUANA CRUDA

¿El error más frecuente entre novatos? Usar marihuana cruda.

El calor es necesario para activar el THC y/o CBD del cannabis a través de un proceso conocido como descarboxilación. Aunque suena complicado, en realidad es bastante sencillo. Extiende la marihuana triturada sobre una bandeja para el horno, y métela a unos 110-120°C durante más o menos una hora. Asegúrate de revolver el cogollo AL MENOS cada 15 minutos. Se trata de activar los compuestos, no de quemarlos.

Cuando hagas cannabutter, acuérdate de mantener una temperatura baja y constante durante un período de tiempo prolongado, algo que hacen muy bien las ollas de cocción lenta (por si tienes una).

Recuerda: DEBES descarboxilar el cogollo antes de añadirlo a la grasa.

COCINAR CON MARIHUANA CRUDA

2. TRITURAR EL CANNABIS DEMASIADO FINO

Aunque algunos chefs del cannabis recomiendan triturar la hierba con un robot de cocina o un molinillo de café, hay muchas razones para no hacerlo. Cuando se pulveriza el cogollo, los comestibles adquieren un sabor a hierba que puede ser un poco desagradable, y es posible que el aceite o mantequilla adopten un tono verde oscuro. En su lugar, utiliza un grinder bastante tosco, ya que lo ideal es lograr una consistencia como de sal gruesa.

TRITURAR EL CANNABIS DEMASIADO FINO

3. GASTAR UN MONTÓN DE DINERO EN COGOLLO PARA COCINAR

Un poco puede cundir mucho. Algunos principantes usan un montón de cogollo cuando empiezan a experimentar en la cocina. En general, no necesitas mucho para conseguir el efecto que buscas. Echa un vistazo a esta receta de cannabutter para hacerte una idea de la cantidad que deberías utilizar.

A diferencia de cuando se fuma, no solo hay que usar el mejor cogollo. También se pueden extraer cannabinoides de los tallos, las hojas, los recortes y las migajas. Con migajas nos referimos a los restos que quedan en el fondo de la bolsa y que a veces consisten en una mezcla de diferentes tipos de cannabis. Las cocinas comerciales, sobre todo en Estados Unidos, a menudo combinan varios cogollos distintos, así que si puedes, considera esta opción. Y deja lo mejor para cuando fumes.

GASTAR UN MONTÓN DE DINERO EN COGOLLO PARA COCINAR

4. OLVIDARTE DE AÑADIR AGUA AL ACEITE O MANTEQUILLA

Aunque algunos puristas no están de acuerdo, añadir agua al infusionar la grasa es un truco muy interesante. De esta forma, el aceite o mantequilla no se quemarán, y los cannabinoides no acabarán degradándose. No hay que añadir una cantidad exacta de agua, pero trata de usar al menos la misma que de aceite o mantequilla. El agua se evaporará. También verás la diferencia en el producto final, que no será tan verde.

OLVIDARTE DE AÑADIR AGUA AL ACEITE O MANTEQUILLA

5. EXPRIMIR HASTA LA ÚLTIMA GOTA DE LA MEZCLA

Tras infusionar la cannabutter, tendrás que colarla despacio y con cuidado. Lo mejor es usar una estopilla, que solo deja pasar el aceite. Ten cuidado de no exprimirla demasiado fuerte, o acabarás con un exceso de material vegetal en la mezcla. Hazlo con delicadeza y coloca el filtro sobre un cuenco para que la gravedad haga todo el trabajo.

EXPRIMIR HASTA LA ÚLTIMA GOTA DE LA MEZCLA

6. NO COMPROBAR LA POTENCIA DE LA MEZCLA ANTES DE COCINAR

Cocinar en casa con cannabis no tiene por qué ser una ruleta rusa. Es importante probar el octanaje, especialmente si se trata de una receta nueva. Comprueba la potencia de la mezcla antes de cocinar con ella.

Tómate una cucharadita de la grasa enriquecida como dosis personal. Espera una hora y analiza el efecto. Esto te ayudará a conocer la potencia de todo el lote.

Otra alternativa es usar la mezcla primero como aliño. Se trata de una forma sencilla de controlar la dosis y medir los efectos cuando se toma con alimentos, y para saber cuánto tarda en hacer efecto.

NO COMPROBAR LA POTENCIA DE LA MEZCLA ANTES DE COCINAR

7. NO REMOVER O DISTRIBUIR BIEN

Cuando se añade aceite o mantequilla con cannabis a una receta, hay que asegurarse de distribuirlos bien. En caso contrario, puede que alguien no sienta nada y otros acaben por las nubes. Remueve bien la mezcla. Y después, vuelve a removerla.

NO REMOVER O DISTRIBUIR BIEN

8. NO SABER CÓMO INCORPORAR LOS CONCENTRADOS

Cocinar con concentrados ya preparados también es un arte que requiere de práctica para hacerlo bien.

Cocinar con kief es fácil y divertido. Su textura fina hace que se disuelva de forma casi instantánea en líquidos y grasas, y a veces incluso a temperatura ambiente. El hachís, sin embargo, requiere de un poco más de preparación, aunque esto también depende de su consistencia. El hachís seco se puede triturar con un robot de cocina. Las variantes pegajosas deben calentarse hasta que se derritan.

Ten en cuenta que los concentrados de cannabis son más fuertes que el cogollo, por lo que necesitarás menos cantidad para lograr la misma potencia. 

NO SABER CÓMO INCORPORAR LOS CONCENTRADOS

9. DESCONOCER EL TAMAÑO DE LA RACIÓN

Para conocer la potencia de tus comestibles, es esencial calcular las dosis. En general, la mayoría de los cogollos contienen entre un 15 y un 20% de THC, pero, ¿qué significa esto a la hora de cocinar?

Si viviéramos en un mundo en el que el 100% del THC de la planta se transfiere a los comestibles, una variedad con un 20% de THC se podría desglosar de la siguiente manera:

1 gramo de cogollo = 1.000mg peso seco = 200mg de THC

Por lo tanto, si fueras a preparar un comestible con una potencia nivel principiante (generalmente, entre 5 y 10mg por comestible), con 1 gramo de hierba harías 20 comestibles. Pero no vivimos en un mundo perfecto, y en realidad solo se transfiere alrededor del 50%. Así que, para hacer 20 comestibles con una hierba con 20% de THC, necesitarás 2 gramos de cogollo.

DESCONOCER EL TAMAÑO DE LA RACIÓN

10. NO ELEGIR LA VARIEDAD ADECUADA

Al igual que cuando se fuman, las diferentes variedades inducen efectos distintos. Si bien esto tiene algo que ver con la genética de la planta (índica vs sativa), ciertos perfiles cannabinoides y terpenoides ejercen una influencia mayor.

Los terpenos son los responsables de los sabores y aromas de una planta. A medida que aprendemos más sobre el cannabis, vamos descubriendo que los terpenos también desempeñan un papel fundamental en los efectos de la marihuana.

El efecto séquito es un fenómeno de sinergia química que se produce entre los distintos compuestos del cannabis cuando se ingieren juntos. Esto es aplicable al THC, el CBD, los terpenos y otros numerosos compuestos de la planta.

NO ELEGIR LA VARIEDAD ADECUADA

Dependiendo del efecto que busques, una de las cuatro siguientes variedades es un punto de partida excelente para empezar a hacer comestibles:

• Rica en THC para obtener un efecto fuerte: Royal Gorilla

Un híbrido índica/sativa al 50%, la Royal Gorilla ofrece un perfil terpenoide dominado por el pineno, lo que se traduce en un subidón cerebral junto a un relajante colocón físico que calma todo el cuerpo. Con un nivel de THC por encima del 25%, no deberías subestimar esta variedad. Dosifícala con precaución.

Royal Gorilla

• Rica en terpenos aromáticos: Lemon Shining Silver Haze

Con una concentración alta de limoneno, la Lemon Shining Silver Haze, de sabor dulce y cítrico, te proporcionará un colocón y un subidón. El limoneno es conocido por su aroma cítrico, y algunos isómeros huelen a naranja y otros a limón. En cualquier caso, la Lemon Shining Silver Haze te vigorizará y hará que quieras más.

Lemon Shining Silver Haze

• Buena proporción de THC respecto a CBD para obtener un efecto relajante y lúcido: Medical Mass

Si buscas una variedad de efecto calmante pero suave, prueba la Medical Mass. Esta hierba de sabor dulce y especiado deja la mente lúcida pero tranquila. Con un 10% de THC y otro 10% de CBD, es una excelente candidata para hacer comestibles de potencia media.

Medical Mass

• Rica en CBD para obtener un efecto calmante: Solomatic CBD

Si solo te interesa el CBD y no quieres colocarte, la Solomatic CBD es una alternativa estupenda a la Lemon Shining Silver Haze. Tiene un perfil terpenoide parecido, pero sin el subidón del THC. De hecho, contiene hasta un 21% de CBD.

SOLOMATIC CBD

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