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Jack Herer: resumen de la vida y legado del Emperador del cáñamo
Jack Herer fue una de las figuras más importantes del movimiento cannábico moderno. En este artículo repasamos la vida de este hombre y sus contribuciones al sector de la marihuana.
Si consumes hierba desde hace tiempo, es probable que ya conozcas la variedad Jack Herer; así como su sabor cítrico y el subidón cerebral que produce.
Y si prefieres las cepas sativas, podrías haber hecho de esta apreciada cepa tu compañera fiel durante esas mañanas interminables y aburridas. Cuando necesitas potenciar tu creatividad, está ahí para ayudarte.
Pero es posible que muchas personas no estén familiarizadas con el hombre en cuyo honor se ha bautizado a esta cepa. Es probable que no conozcan sus logros y contribuciones, y lo que representa.
Tanto si lo conoces como si no, este artículo es un homenaje y una introducción al hombre, la leyenda, el difunto "Emperador del cáñamo": Jack Herer.
Índice:
¿Quién es Jack Herer?
A Jack Herer se le ha descrito como un "gran combatiente por la libertad" de la marihuana. Al fin y al cabo, se hizo famoso por su activismo a favor de la despenalización y legalización del cannabis. Herer también luchó para promover una mayor utilización del cáñamo con fines industriales.
Pero, de joven, Herer no parecía el tipo de persona que acaba convirtiéndose en activista del cannabis.
Nacido en 1939 en el seno de una familia judía conservadora de Buffalo, Nueva York, Jack era un hombre de lo más tradicional. Se alistó en el ejército de EE UU a los 17 años, y fue un ferviente partidario de la guerra de Vietnam al comienzo de su vida adulta.
Republicano convencido, Herer expresó su rechazo ante quienes se manifestaban contra la guerra en los años 60. Condenó a quienes se oponían a los esfuerzos militares del gobierno, y llegó a calificarlos de “antiamericanos”. Antes de cumplir los 30, Herer ya estaba casado y tenía su propia familia.
En esa época, Jack tampoco tenía una opinión favorable de la marihuana. Dado que creció durante el momento álgido de la campaña propagandística de Reefer Madness, admitió sentir un profundo miedo por la hierba. Herer tampoco veía con buenos ojos el movimiento hippie, y con el tiempo desarrolló una aversión total hacia él por su asociación con la marihuana.
¿Cómo comenzó la relación de Herer con la hierba?
Jack se divorció pasados los 30, pero no tardó mucho en encontrar otra pareja. Y esta nueva novia cambiaría su vida para siempre.
Una noche, le preguntó si alguna vez había fumado marihuana. Él, por supuesto, le dijo que no, a lo que ella respondió: "Creo que deberías hacerlo".
No hace falta decir que Jack quedó encantado con la hierba mágica. Abrió los ojos a una perspectiva completamente nueva. Describió la experiencia como sensaciones que no sabía que el ser humano fuera capaz de sentir.
Su opinión sobre la guerra también cambió después de ese momento. Como dijo en una entrevista del documental "Jack Herer: Emperador del cáñamo", empezó a darse cuenta de las palabras de los manifestantes y de cómo “tenían significados y texturas reales”.
Fue entonces cuando Jack decidió hacer algo con su nueva fascinación por el cannabis. En 1973, colaboró en la escritura de un libro de historietas titulado "Grass: Great Revolutionary American Standard System", junto a su amigo Al Emmanuel.
Ambos lo calificaron como "la guía oficial" para evaluar la calidad de la marihuana. También tenían un sistema de clasificación, con 1 como puntuación más baja y 10 para la más alta. El libro, del que se vendieron unas 30.000 copias clandestinas, ganó muchos adeptos. Este fue el punto de inflexión para la carrera de Herer, que se convirtió en una figura muy respetada del mundo del cannabis.
Royal Jack Auto
Jack Herer x Ruderalis | |
350 - 400 gr/m2 | |
40 - 80 cm | |
7 - 8 Semanas | |
THC: 16% |
Sativa 40% Indica 30% Ruderalis 30% | |
70 - 120 gr/plant | |
60 - 80 cm | |
11 - 12 weeks after sprouting | |
Creativo, Motivador |
Nace un Emperador
A medida que su popularidad aumentaba en este sector, Herer continuó intensificando su compromiso. Y aunque empezó a luchar contra la propaganda antimarihuana, su verdadera pasión era el cáñamo.
Intentó asociarse con sus colegas activistas de la Organización Nacional para la Reforma de las Leyes de Marihuana (NORML), pero todos sus esfuerzos fueron en vano, ya que estas personas estaban más interesadas en modificar las leyes del cannabis, y no sentían la misma pasión que él por el cáñamo.
Con el tiempo, Herer encontró un aliado en Ed Adair, alias “Captain Ed”, un reformista del cannabis y propietario de una headshop de Los Ángeles, con el que redactó una declaración en defensa de la marihuana. Ambos obtuvieron un gran respaldo, consiguiendo miles de firmas en muy poco tiempo.
Tanto Herer como Adair consideraban los encarcelamientos relacionados con la marihuana como una "gran injusticia" contra la que estaban dispuestos a luchar sin reparos. En 1979 abrieron su primera tienda de cáñamo en Estados Unidos, situada en la Playa de Venice de California.
Para Herer, el cáñamo era una fuerza vital muy valiosa. Era consciente de su gran potencial como elemento primario en la fabricación de recursos vitales como ropa, papel, e incluso combustible limpio. Para él, era la respuesta a los problemas más graves del planeta, como la deforestación, el calentamiento global y la contaminación.
El emperador está desnudo: el mayor logro de Herer
En la década de los 80, el gobierno estadounidense intensificó sus medidas represivas contra la marihuana. Sus políticas de tolerancia cero hacia la hierba mágica alcanzaron un máximo histórico.
Al ser uno de los principales representantes pro cannabis de aquel momento, Herer era un objetivo claro para la policía. En 1981, fue arrestado por allanamiento de morada en una propiedad federal de California. En ese momento, se encontraba recogiendo firmas a favor de una iniciativa de ley en ese estado.
Tras negarse a pagar la multa de 5$, Herer fue sentenciado en 1983 a una condena de 14 días en una prisión federal. Durante su estancia en la cárcel escribió su famoso libro El emperador está desnudo, que fue publicado dos años más tarde.
Este libro, que fue un éxito de ventas absoluto, refleja la opinión de Herer sobre el cáñamo y la marihuana: el primero es una fuente renovable esencial, que hace que la segunda sea igual de fundamental.
El libro también toca muchas de las cuestiones polémicas que rodean al cannabis, como la creencia de que es una "droga de acceso" a sustancias más duras. Para Herer, este argumento era una mera "teoría social".
Destacó la ausencia de afirmaciones serias que demostraran que las propiedades farmacológicas de la marihuana constituían "un factor de riesgo para la progresión" a otras sustancias mucho más peligrosas. Según Herer, “la verdadera puerta de iniciación a las drogas más duras es la prohibición”.
Tras su puesta en libertad, Herer se trasladó a Portland, Oregón, y en 1987 abrió otra headshop llamada The Third Eye. Ubicada en el distrito de Hawthorne de esta ciudad, se ha convertido en un destino de peregrinación para los amantes de la marihuana, tanto locales como turistas.
Durante esa época, Herer también tenía aspiraciones políticas. Fue candidato a la presidencia en dos ocasiones, en 1988 y 1992, con el ya desaparecido partido político Grassroots Party.
Últimos años y muerte de Herer
Herer continuó con su activismo durante muchos años. En 1990, tuvo una de las semanas más ajetreadas de su vida, pronunciando discursos en un total de 60 manifestaciones en 48 ciudades distintas.
Herer contrajo matrimonio tres veces más. Su última esposa, Jeannie Hawkins, con quien se casó en el año 2000, estuvo a su lado mientras continuaba defendiendo su causa. Pero ese estilo de vida tan frenético también afectó a su salud física.
En 2000, Herer sufrió un ataque cardíaco y un derrame cerebral durante un festival de cáñamo cerca de Eugene, Oregón. Durante un breve periodo de tiempo tuvo dificultades para hablar y mover el lado derecho del cuerpo.
Pero Herer no se rendía fácilmente. Después de pasar por un proceso de recuperación agotador, volvió a la carga. Atribuyó esa recuperación al consumo diario de aceite de cannabis altamente concentrado, y a la ingesta periódica de hongos psicoactivos.
Por desgracia, Herer sufrió otro infarto en septiembre de 2009, en el Festival Hempstalk de Portland. Esta vez fue más grave, y no volvió a ser capaz de comunicarse adecuadamente.
El 15 de abril de 2010, Jack Herer, uno de los héroes del activismo cannábico más famosos del mundo, falleció a causa de las complicaciones de su segundo ataque al corazón. Tenía 70 años.
El legado de Jack Herer
Sin duda, Jack Herer nos ha dejado un legado muy rico que recordamos de muchas maneras. En cierto modo para peor, y en otro, para mejor.
Un legado controvertido
A pesar de los numerosos logros que revolucionaron el mundo del cannabis, tanto a nivel cultural como industrial, en la vida de Herer no faltaron las controversias, los detractores ni los contratiempos. Uno de sus principales enemigos, que a menudo recibió fuertes críticas por parte tanto de amigos como de oponentes, fue él mismo.
Jack Herer fue descrito muchas veces como un hombre con una pasión tan grande por su causa que se acabó dejando llevar por el fanatismo, el absolutismo y el engrandecimiento. Aunque fue una de las personas más influyentes de la lucha a favor de la legalización, su militancia a menudo incomodaba a la gente, lo que hizo que fuera más difícil convencer a grupos más moderados solamente con datos.
Incluso con una plataforma basada en información contrastada, Jack Herer también fue acusado de embellecer e idealizar lo que son capaces de hacer el cáñamo y el cannabis. Por ejemplo, el Dr. Hayo MG van der Werf, un reconocido experto del cáñamo, le criticó por sus declaraciones sobre la estopa de esta planta, que es un valioso recurso industrial.
Según Herer, el contenido de celulosa de la estopa de cáñamo es de alrededor de un 60-70%, lo que aumentaría su valor, cuando en realidad se cree que se acerca más a un 32-38%. Aunque es posible que esta afirmación no fuera una exaltación intencional. La ciencia del cáñamo se encontraba en sus etapas iniciales, por lo que era muy fácil cometer ese tipo de errores. Sin embargo, esta incapacidad para rectificar no ayudó a la causa de Herer.
Un legado progresista y positivo
Pero no todo es negativo en el legado de esta gran figura. De hecho, es todo lo contrario. Por algo es un héroe del movimiento pro legalización del cannabis.
Jack Herer murió con las botas puestas, mientras su causa empezaba a cobrar fuerza. En el momento de su muerte, 14 estados y el distrito de Columbia ya habían legalizado la marihuana medicinal, en gran parte gracias a su inquebrantable voluntad y pasión por divulgar la verdad sobre el cannabis.
También escribió El emperador está desnudo con la ayuda de Paul Stanford, creador de la Fundación de cáñamo y cannabis, una organización que ha ayudado a más de 250.000 personas a acceder a la marihuana medicinal de forma legal.
A pesar de las críticas que recibió, Herer fue una figura muy influyente y enormemente respetada entre los aficionados al cannabis de todo el mundo. Tanto, que los cultivadores han creado una variedad en su honor, le incluyeron en el Salón de la fama de la contracultura en 2013, y celebran un certamen de premios de cannabis en su nombre.
La cepa Jack Herer, creada a mediados de los 90 en los Países Bajos, se sigue considerando un clásico, muchos aficionados disfrutan de ella, y se utiliza en todo el mundo como base para crear nuevos híbridos. Es especialmente apreciada por su potencia y contenido de CBG de entre un 0,2 y un 2,2%.
Cuando se fuma, la Jack Herer es la encarnación perfecta de la personalidad de este hombre. Unas pocas caladas de esta hierba producen un subidón mental lúcido y despejado, como la forma en la que enfocaba su adorada causa. Como prueba, esta cepa ha ganado más de 14 premios.
Independientemente de lo que opines sobre Jack Herer, una cosa está clara: sin él, el movimiento por la legalización no estaría donde se encuentra en estos momentos. Es posible que su pasión intimidara a algunas personas, pero es la razón por la que muchos fueron capaces de descubrir la verdad. Su capacidad para reunir información sobre la marihuana y presentarla de una manera accesible y fácil de entender, ayudó a eliminar muchos prejuicios e inspiró a toda una generación de activistas. Y por eso, siempre le estaremos agradecidos.
Descansa en paz, Emperador.