Guía de cultivo de marihuana de Royal Queen Seeds

By Steven Voser

Para conseguir los mejores resultados, deberás secar tu cannabis en un ambiente controlado, con una temperatura de 15-21°C y una humedad relativa del 45-55%. Y después, tendrás que secarlo en recipientes de calidad, con una HR del 58-62%, para mejorar aún más su sabor, aroma y potencia. Sigue leyendo para descubrir cómo secar y curar la marihuana y disfrutar de buenas fumadas en todo momento.

Un proceso paso a paso de secado y curado de cogollos de cannabis, que incluye colgado de los cogollos, manicurado con tijeras y almacenamiento en frascos herméticos para una óptima conservación.

¿Por qué es necesario secar y curar el cannabis?

El proceso final de secar y curar la marihuana es fundamental. Un secado y curado adecuados convierten la hierba bien cultivada en los cogollos potentes y sabrosos que busca cualquier cultivador a la hora de sembrar sus semillas.

Para empezar, el proceso de secado elimina la humedad de las flores recién cosechadas, garantizando que se calienten de forma adecuada cuando las fumes o vapees, y que puedas almacenarlas durante períodos prolongados sin que se enmohezcan. También pone en marcha los procesos químicos necesarios para que tu hierba produzca los efectos que buscas (como la descarboxilación).

Por otro lado, el proceso de curación implica almacenar la hierba en los recipientes y las condiciones apropiadas para garantizar que sus aromas, sabores y potencia se desarrollen aún más. Aunque, técnicamente, la marihuana se puede fumar después del secado, el curado es lo que determina la calidad final de una cosecha.

En definitiva, los procesos de secado y curado ayudan a:

  • Eliminar la humedad de los cogollos frescos para que se puedan fumar, vaporizar y almacenar sin que desarrollen moho.
  • Activar los cannabinoides y terpenos para que la hierba resulte más potente, sabrosa y aromática.
  • Degradar la clorofila para garantizar una experiencia suave a la hora de fumarla o vapearla.
Secado y curado adecuados
Sabor y aroma Intenso, aromático y denso
Calidad del humo Alta
Riesgo de moho Bajo
Potencia Alta
Secado y curado inadecuados
Sabor y aroma Débil y desagradable
Calidad del humo Áspero
Riesgo de moho Alto
Potencia Baja

¿Cuánto tiempo se tarda en secar adecuadamente el cannabis?

El secado de la marihuana suele tardar de 7 a 14 días, dependiendo de factores como:

  • El tamaño de los cogollos: Los más grandes y densos tardan más en secarse que los delicados y esponjosos.
  • Manicurado y secado: Los cogollos manicurados se secan más rápido que los que no se recortan. Además, las ramas grandes tardan más en secarse que las pequeñas y los cogollos por separado.
  • Temperatura y humedad: Los cogollos se secan más rápido en condiciones cálidas y secas.
Secado suspendido
7-14 días Secado lento tradicional
Secado en rejilla

5-10 días

Secado rápido para cogollos pequeños. Ideal para cosechas grandes.
Secado en armarios
7-14 días Permite un mayor control. Ideal para cultivadores con experiencia.

¿En qué se diferencian el secado y el curado?

El secado y el curado son dos procesos poscosecha fundamentales para conseguir una hierba de calidad, y se diferencian en los siguientes aspectos:

  • El secado elimina la humedad de los cogollos. Esto garantiza que puedan almacenarse sin desarrollar moho y que se quemen o vaporicen adecuadamente. Además, el secado también comienza a descomponer algunos de los cannabinoides presentes en el cannabis crudo, lo que hace que el humo sea más potente.
  • El curado descompone la clorofila de los cogollos secos y promueve el desarrollo de terpenos y cannabinoides. Ayuda a conseguir un producto final suave, potente y sabroso.
Comparación de los procesos de secado y curado del cannabis: a la izquierda, plantas de cannabis recién cosechadas listas para colgar y secar; a la derecha, cogollos recortados colocados en frascos de vidrio para un curado y almacenamiento adecuados.

Explicación científica del secado y el curado

Los cogollos de marihuana contienen aproximadamente un 80% de agua en el momento de la cosecha. Este alto contenido de humedad debe reducirse gradualmente para garantizar un humo suave y sabroso, y un producto duradero. Y aquí es donde entra en juego el secado, ya que elimina el exceso de humedad de las flores, haciendo que sean menos propensas a desarrollar moho y mejorando su combustión.

A medida que el cannabis se seca, se va descarboxilando poco a poco (una reacción química en la que los ácidos cannabinoides como el THCA y el CBDA pierden un grupo carboxilo, transformándose en sus formas activas THC y CBD). Estos últimos son los compuestos que la mayoría de los consumidores buscan en los cogollos secos, ya que contribuyen a los efectos psicoactivos y holísticos de la hierba. La fase final de la descarboxilación tiene lugar cuando se calienta el cannabis, ya sea para fumarlo, vaporizarlo o cocinarlo en el horno para preparar comestibles.

Una vez que los cogollos están secos, el curado ayuda a mejorar aún más su calidad. Durante este proceso continúa la descarboxilación, pero a un ritmo más lento, lo que permite que los terpenos (los compuestos aromáticos responsables de los sabores y aromas únicos del cannabis) maduren y se desarrollen más. Este lento proceso de maduración frena la degradación de los cannabinoides y los terpenos, preservando la potencia de la planta y mejorando la experiencia de fumar.

El curado también ayuda a descomponer la clorofila (el pigmento responsable del color verde del cannabis), lo que elimina el sabor desagradable y herbáceo de las flores frescas o sin curar. El resultado es un humo más suave y agradable, con unos sabores y aromas más complejos.

Cuando llega el momento de la cosecha, es normal que te entren las prisas al ver que tus plantas están repletas de cogollos. Sin embargo, es fundamental tener paciencia y dedicar un tiempo a secar y curar adecuadamente la hierba para conseguir cogollos potentes, sabrosos, aromáticos y, lo más importante, aptos para almacenarlos a largo plazo.

¿Cuál es la mejor forma de manicurar la marihuana, en húmedo o en seco?

Hay dos métodos principales para manicurar los cogollos tras la cosecha: En fresco (inmediatamente después de cosecharlos) y en seco (después de que se hayan secado).

El método de manicurado que elijas influirá en todas las características de la hierba, desde la suavidad del humo hasta el atractivo visual de los cogollos. La elección dependerá de tus preferencias, ya que ambas técnicas tienen ventajas e inconvenientes.

Manicurado en húmedo y en seco: Pros y contras

Método de manicurado | Pros | Contras |

| Manicurado en húmedo | Secado más fácil y rápido. | La hierba podría secarse demasiado rápido y perder terpenos. Mayor riesgo para los cultivadores inexpertos de “manicurar en exceso” sus cogollos. |

| Manicurado en seco | Promueve un secado más lento que mejora los sabores y aromas. | Un plazo más prolongado de secado requiere paciencia. En malas condiciones, el manicurado en seco puede aumentar el riesgo de que los cogollos desarrollen moho. |

Manicurado en húmedo
Secado más fácil y rápido. La hierba podría secarse demasiado rápido y perder terpenos. Mayor riesgo para los cultivadores inexpertos de “manicurar en exceso” sus cogollos.
Manicurado en seco

Promueve un secado más lento que mejora los sabores y aromas.

Un plazo más prolongado de secado requiere paciencia. En malas condiciones, el manicurado en seco puede aumentar el riesgo de que los cogollos desarrollen moho.

¿No sabes qué método de manicurado elegir? Consulta nuestra guía completa de manicurado de cannabis aquí.

Comparación entre la manicura en húmedo y en seco del cannabis. A la izquierda, la manicura en húmedo se realiza justo después de la cosecha, facilitando la eliminación de hojas. A la derecha, la manicura en seco se hace después del secado, mejorando el curado y la retención de terpenos.

Después de cosechar y manicurar los cogollos, ¿cuál es la mejor forma de secarlos?

La mejor forma de secar los cogollos de marihuana es colgándolos en un lugar bien ventilado. Permitir que el aire circule libremente por todas las partes de las flores garantiza que se sequen de manera uniforme y gradual.

Recomendamos tres métodos principales de secado:

  • Secado suspendido: Cuelga las plantas en un cuarto, armario o espacio similar.
  • Secado en rejilla: Pon los cogollos o ramas sobre una rejilla de secado.
  • Secado en armario: Cuelga el cannabis en un armario de secado para tener un control total del entorno.

Métodos de secado: Pros y contras

Secado suspendido
Pros Ideal para colgar plantas enteras o ramas grandes. Garantiza un secado lento y paulatino, y minimiza la degradación de los terpenos y cannabinoides.
Contras Más lento que el secado en rejilla. No es adecuado para espacios pequeños ni cultivadores que necesitan secar rápidamente grandes cantidades de hierba.
Secado en rejilla

Pros

Utiliza rejillas o mallas de secado especialmente diseñadas para secar cogollos separados. Mucho más rápido que el secado suspendido y excelente para secar cosechas grandes en espacios pequeños.
Contras Mayor riesgo de que los cogollos se sequen demasiado.
Secado en armario
Pros Ideal para crear un ambiente de secado aislado. Se pueden usar mallas o colgar las plantas/ramas grandes para que se sequen.
Contras Hace falta un armario de secado especial y un control ambiental completo, algo a lo que no todos los cultivadores tienen acceso.

Factores ambientales que influyen en el secado

Los principales factores ambientales que afectan al secado de la marihuana son la temperatura, la humedad y el flujo de aire.

  • Las temperaturas altas (superiores a 23°C) secan el cannabis más rápido, pero también pueden degradar rápidamente los cannabinoides y terpenos, dando lugar a un producto final menos potente, aromático y sabroso.
  • Las temperaturas bajas (inferiores a 15°C) ralentizan el proceso de secado, retrasando el momento en el que la hierba está lista para consumir.
  • La humedad alta (más del 60% de HR) crea un ambiente ideal para la aparición de bacterias y hongos, lo que aumenta la posibilidad de que los cogollos desarrollen moho.
  • La humedad baja (menos del 40% de HR) aumenta el riesgo de que la hierba se seque demasiado, lo que degrada sus cannabinoides y terpenos.
  • Mala ventilación: La ausencia de flujo de aire hace que las temperaturas aumenten, dado que el aire estancado se acumula en el espacio de secado. Esto produce más calor en la zona, desencadenando los problemas relacionados con las temperaturas altas ya mencionados.
  • Buena ventilación: Colgar la marihuana en un espacio en el que haya viento (por ejemplo, delante de un ventilador) hará que los terpenos y cannabinoides se degraden, lo que afectará a los aromas, sabores y potencia de la hierba.

Herramientas para mantener la humedad y temperatura ideales

Estas son las principales herramientas para conseguir el ambiente adecuado para secar la marihuana:

  • Termohigrómetros (para controlar la temperatura y la humedad del espacio de secado)
  • Humidificadores o deshumidificadores (para reducir y aumentar la HR)
  • Aire acondicionado (para controlar la temperatura del espacio de secado)
  • Ventiladores (para ventilar el área de secado)

Cómo secar los cogollos: Ideas para secar el cannabis

Los cultivadores pueden llegar a ser muy ingeniosos a la hora de secar sus cogollos. Sin embargo, siempre que sea posible recomendamos limitarse a las técnicas de secado comprobadas, como el secado suspendido, en rejilla o en armarios. Estos métodos producen buenos resultados de manera fiable. Evita secar tu hierba en lugares improvisados (como por ejemplo, dentro de cajas de cartón) salvo que no tengas otra alternativa.

Las mejores herramientas para secar marihuana

  • Sobre rejillas o mallas de secado (como la malla de secado RQS): La mayoría de cultivadores no pueden permitirse colgar plantas enteras en un cuarto o armario de secado. Las rejillas de secado son ideales para maximizar el espacio y garantizar que el aire circule libremente alrededor de los cogollos.

  • Controladores climáticos: Los humidificadores, deshumidificadores y aparatos de aire acondicionado proporcionan un control preciso del entorno y permiten establecer las condiciones perfectas para maximizar la calidad de las cosechas. Sin embargo, salvo que vivas en una zona con un clima extremo, no necesitarás estas herramientas.
  • Ventiladores: Los ventiladores oscilantes suelen ser suficientes para hacer que el aire fresco circule alrededor de los cogollos, garantizando que se sequen de forma adecuada.

Errores habituales durante el secado y cómo evitarlos

El secado del cannabis es un proceso sencillo, pero eso no significa que no puedan surgir problemas de vez en cuando. Estos son algunos de los errores más habituales que suelen cometer los cultivadores al secar la hierba:

  • Secado excesivo: Ansiosos por probar el fruto de su trabajo, algunos cultivadores inexpertos intentan acelerar el proceso de secado. Y al hacerlo, a menudo secan en exceso la hierba, deteriorando su aroma y potencia.
  • Problemas de moho: Los ambientes húmedos pueden hacer que los cogollos desarrollen moho. Este es un problema habitual para los cultivadores que viven en zonas con climas muy húmedos o que carecen de las herramientas para reducir la humedad del cuarto de secado.
  • Ventilación inadecuada: La falta de flujo de aire hace que se acumule aire caliente alrededor de los cogollos, secándolos de forma desigual. Y un flujo de aire excesivo puede degradar los terpenos y los cannabinoides de la hierba, afectando a su sabor, aroma y potencia.

¿Cómo sé que los cogollos están bien secos y listos para curar?

Los cogollos de marihuana están listos para curar cuando solo contienen un 10-12% de humedad. Pero ¿cómo sabes cuánta humedad hay en tu hierba? Algunas de las formas más populares de averiguarlo son:

  1. Prueba del ruido del tallo: Este es uno de los métodos más utilizados para comprobar el nivel de humedad del cannabis. Consiste en doblar los tallos de los cogollos; si se rompen con un chasquido, lo más probable es que los cogollos estén lo suficientemente secos como para curarlos. Si los tallos no se rompen limpiamente, los cogollos aún estarán húmedos y requerirán un secado adicional.
  2. Prueba de la textura de los cogollos: Los cultivadores avanzados saben si sus cogollos están lo suficientemente secos observando su textura. Las flores secas deberán ser ligeras y pegajosas. Los cogollos que se hayan secado en exceso tendrán una textura quebradiza, mientras que los que contengan demasiada humedad pesarán más y estarán húmedos y suaves al tacto.
  3. Medidores de humedad: Como su nombre indica, los medidores de humedad se utilizan para medir la humedad de la madera y otros materiales. Los dispositivos económicos de Amazon y otras tiendas similares funcionan decentemente a la hora de medir la humedad de las flores de cannabis, haciendo que sea más fácil secarlas y curarlas.

¿Cómo se curan los cogollos?

El curado es un proceso lento y controlado que tiene lugar después del secado. Ayuda a mejorar la calidad de los cogollos secos al promover el desarrollo de los terpenos y estabilizar los cannabinoides.

La marihuana curada adecuadamente tendrá unos aromas y sabores más ricos y complejos, y unos efectos más potentes. Mientras que un curado básico solo tarda entre 2 y 4 semanas, si se hace durante 3-6 meses, puede mejorar enormemente el sabor y aroma. La marihuana de calidad procedente de, por ejemplo, los dispensarios, se caracteriza por un curado de larga duración.

¿Tienes experiencia cultivando hierba? Prueba tus cogollos en diferentes etapas del proceso de curado para ver cómo cambian. En general, las ventajas de un curado prolongado son:

  • Mejor sabor y aroma
  • Humo menos áspero
  • Combustión o vaporización uniforme

Proceso de curado de cannabis paso a paso

El curado del cannabis lleva tiempo, pero es muy sencillo. Aquí tienes una descripción detallada de cómo hacerlo:

  • Mete los cogollos secos en frascos de vidrio con cierre hermético, llenándolos aproximadamente un 75% para permitir el flujo de aire.
  • Coloca packs de humedad dentro de los frascos. Los del 58-62% son los que mejor funcionan.
  • Guarda los frascos en un lugar fresco y oscuro (idealmente con una temperatura de entre 15 y 21°C).
  • Abre los frascos dos veces al día durante las primeras dos semanas. Para hacerlo correctamente, ábrelos durante unos minutos y remueve la hierba con cuidado para permitir el intercambio de oxígeno.
Instrucciones en cuatro pasos para curar cannabis correctamente. 1: Llena un frasco con cogollos secos (hasta el 75%). 2: Añade paquetes de humedad para mantener niveles óptimos. 3: Guarda el frasco en un lugar fresco y oscuro. 4: Abre el frasco diariamente para airearlo.

Consulta nuestra guía completa sobre cómo curar cannabis para ver unas instrucciones más detalladas.

Errores habituales que debes evitar al curar la marihuana

  • Humedad alta: El exceso de humedad es tu principal enemigo a la hora de secar y curar la hierba. Asegúrate de comprobar los cogollos con frecuencia durante la primera semana. Si el interior de los frascos huele a hierba, humedad o moho, saca los cogollos y ponlos en una bolsa de papel durante 1-3 días para ayudar a extraer más humedad.
  • Humedad baja: Si la humedad dentro de los frascos de curado es demasiado baja, los cogollos pueden secarse demasiado y perder su aroma, sabor y potencia naturales. El uso de packs de humedad es la mejor forma de garantizar que la humedad de los frascos de curado sea siempre óptima.
  • Abrir los frascos demasiadas veces o muy pocas: Abrir y cerrar los frascos demasiadas veces puede afectar a la temperatura y la humedad de dentro, haciendo que los cogollos se sequen demasiado. En cambio, abrirlos con poca frecuencia puede provocar la acumulación de aire viejo y estancado, aumentando el riesgo de que desarrollen moho.

¿Cuál es el nivel de humedad adecuado para curar marihuana?

El nivel de humedad ideal para curar cannabis es del 58-62%. Dentro de este rango, los cogollos mantendrán su frescura, aroma y potencia sin desarrollar moho. La mejor forma de conservar la humedad adecuada dentro de los frascos de curado es con packs de control de humedad. Nuestros packs de control de humedad RQS, por ejemplo, están especialmente diseñados para curar hierba.

¿Cuánto dura el proceso de curado?

La duración del proceso de curado del cannabis puede variar en función de las preferencias y la paciencia del cultivador. Un curado básico puede tardar solo dos semanas, pero los cultivadores veteranos suelen curar su hierba durante varios meses (o incluso más). Estos son los tiempos de curado estándar dentro del sector:

  • 2-4 semanas: Curado básico. Debe evitarse cuando se buscan los mejores resultados posibles.
  • 3-6 meses: Para mejorar los sabores y la potencia.
  • Más de 6 meses: Cogollos de primera calidad con terpenos y cannabinoides completamente maduros.

Recuerda: El curado de la hierba es un proceso fundamental que, al igual que el secado, no debe apresurarse. Aunque podrás fumar tu marihuana después de curarla dos semanas, mejorará mucho con el tiempo. La mayor parte del cannabis comercial de calidad se cura durante varios meses. Puedes conseguir la misma calidad en casa con un poco de paciencia.

Plazo de curado para conseguir distintos resultados

TABLA

| Tiempo de curado | Resultados |

| 2-4 semanas | El mínimo indispensable. Produce cogollos con un aroma decente y una suavidad moderada. |

| 3-4 meses | Sabores más intensos y delicados. Un buen punto intermedio para la mayoría de fumadores. |

| 4-6 meses | Máxima calidad, con aromas refinados y alta potencia. |

Tiempo de curado Resultados
2-4 semanas El mínimo indispensable. Produce cogollos con un aroma decente y una suavidad moderada.
3-4 meses Sabores más intensos y delicados. Un buen punto intermedio para la mayoría de fumadores.
4-6 meses Máxima calidad, con aromas refinados y alta potencia.

¿Cuál es la mejor forma de almacenar los cogollos secos y curados?

Tras el curado, lo único que debes hacer para preservar tus cogollos es almacenarlos adecuadamente. Por suerte, esto es muy fácil: solo necesitas unos recipientes de calidad y un protocolo bien definido.

Los mejores recipientes de almacenamiento para marihuana

  • Frascos de vidrio: Baratos, herméticos e ideales para un almacenamiento a largo plazo.
  • Frascos de vidrio resistentes a los rayos UV: Un avance respecto a los frascos de vidrio estándar, que ayuda a proteger aún más los cogollos de la luz (que degrada los cannabinoides y terpenos).
  • Bolsas selladas al vacío: Ideales para almacenar grandes cantidades de hierba (no se debe comprimir demasiado). Deben almacenarse en un lugar fresco y seco para garantizar la máxima frescura de los cogollos.
Dos métodos para almacenar cannabis. A la izquierda, cogollos guardados en un tarro de vidrio hermético con un regulador de humedad. A la derecha, flores de cannabis en un recipiente metálico de Royal Queen Seeds.

Consejos para el almacenamiento de cannabis a largo plazo

Para garantizar que tu hierba se mantenga fresca durante más tiempo, ten en cuenta lo siguiente:

  • Evita el plástico: Los recipientes de plástico pueden acumular electricidad estática, lo que degradará el cannabis. Además, el calor podría hacer que las sustancias químicas del plástico se filtren en la hierba.
  • Guarda la marihuana en un lugar fresco y oscuro: El calor y la luz aceleran la degradación de los cannabinoides y los terpenos. Son tu principal enemigo a la hora de almacenar hierba durante períodos prolongados.
  • Mantén una temperatura y una humedad relativa estables: Cuanto más estable sea el entorno de almacenamiento, más tiempo se mantendrá la hierba fresca. Los productos de tabaco de calidad se almacenan en humidores; utiliza el mismo enfoque con tus cogollos. De hecho, ¡estos humidores también son ideales para almacenar hierba!
  • Considera el sellado al vacío para cosechas grandes: ¿Has tenido la suerte de conseguir una cosecha tamaño XL? Almacena tu hierba en bolsas de plástico selladas al vacío para reducir su exposición al oxígeno y alargar su vida útil. Acuérdate de guardar las bolsas en un ambiente oscuro, seco y fresco para maximizar su capacidad de preservar tu hierba.
  • Recuerda las condiciones ideales: Para conseguir los mejores resultados, el cannabis debe almacenarse a 21°C y con un 58-62% de HR.

Secado y curado: Procesos clave para conseguir una cosecha de calidad

Secar y curar la marihuana es fundamental para maximizar su aroma, sabor, potencia y vida útil. Y aunque es lógico que tengas prisa por probar tu hierba nada más cosecharla, es esencial que aprendas a ser paciente para poder secar y curar tu cannabis lentamente. ¡Cuando por fin consumas tu hierba agradecerás estos consejos!

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