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Congelar marihuana fresca: una guía
Lo sabemos: meter tus cogollos de cannabis frescos en el congelador suena arriesgado, o extraño cuando menos. Sin embargo, algunos de los mejores cultivadores de cannabis del mundo colocan sus flores a temperaturas bajo cero justo después de la cosecha. Descubre cómo congelar tu hierba para crear extractos de la máxima calidad.
¿Cómo reaccionarías si alguien te dijera que metieras tu hierba en el congelador? Al principio suena extraño, pero meter los cogollos en bolsas y congelarlos tiene varias ventajas. En primer lugar, elimina la larga tarea de secado y curado. Además, al conservar los perfiles de terpenos y cannabinoides de los cogollos recién cosechados, congelar la hierba también te permite crear algunos de los mejores extractos de cannabis que existen.
Índice:
- ¿Se puede congelar la hierba?
- Hierba fresca congelada: una tendencia en el mercado estadounidense
- ¿Por qué congelar hierba?
- ¿Qué se necesita para congelar hierba fresca?
- Cómo cosechar antes de congelar la hierba
- Cómo congelar hierba
- Cómo usar la hierba fresca congelada
- Cosas que debes evitar al congelar hierba fresca
- Colócate con hierba congelada
¿Se puede congelar la hierba?
Sí. Puedes congelar hierba igual que puedes congelar cualquier fruta o verdura. Pero, ¿por qué iba a tomarse la gente la molestia de hacerlo? Al principio, se podría pensar que es una cuestión de almacenamiento. Sin embargo, las flores secas y curadas adecuadamente siguen siendo viables durante más de un año, aunque el contenido de THC disminuye considerablemente después de este punto.
Principalmente, la congelación de la hierba es el primer paso para hacer extractos de alta calidad; en concreto, los que mantienen los perfiles de cannabinoides y terpenos de las flores frescas de cannabis. Esencialmente, la congelación protege estos compuestos volátiles y garantiza que una mayor cantidad de ellos acabe en el producto final.
Hierba fresca congelada: una tendencia en el mercado estadounidense
No eres el único; nosotros también levantamos las cejas cuando oímos hablar por primera vez de la hierba fresca congelada. Sin embargo, en cuanto entiendas por qué los fabricantes hacen esto, todo quedará claro. La hierba fresca congelada beneficia tanto a los cultivadores como a los consumidores. Desde el punto de vista industrial, la congelación de los cogollos reduce enormemente los costes de mano de obra y el tiempo de producción. En lugar de secar y curar los cogollos (con el consiguiente riesgo de moho y otros patógenos en el proceso) los cultivadores simplemente colocan sus cogollos en congeladores industriales y los envían a los laboratorios para hacer extractos.
Desde el punto de vista del consumidor, el cannabis fresco congelado suele considerarse un producto de mejor calidad. Algunos amantes del cannabis afirman que pueden distinguir entre los extractos elaborados a partir de flores curadas y los derivados del método de congelación en fresco. Pero no hace falta ser ningún especialista para hacer esta distinción. De hecho, debido a la creciente demanda, estos productos (como el live resin y el rosin congelados en fresco) se están convirtiendo en algo casi omnipresente en los dispensarios de todos los Estados Unidos.
¿Por qué congelar hierba?
Como ya hemos comentado, congelar la hierba ofrece una gran ventaja a nivel comercial, y lo mismo ocurre con los cultivadores caseros. Ahora es posible que los cultivadores disfruten de los frutos de su trabajo en un plazo de tiempo mucho más rápido, ya que no es necesario curar ni secar. Aparte del flujo de trabajo, el proceso de congelar la hierba fresca ayuda a preservar los principales fitoquímicos del cannabis, como los terpenos y los cannabinoides. Al fin y al cabo, ¡estos compuestos son la razón por la que la gente cultiva hierba en primer lugar!
Mientras que los cannabinoides son algo más estables, los terpenos se degradan rápidamente tras la cosecha. Estos hidrocarburos volátiles son muy sensibles a las ligeras fluctuaciones de temperatura, así como a la exposición a la luz y al oxígeno. El proceso tradicional de secado al aire y curado del cannabis requiere al menos un mes para obtener buenos resultados. Durante este tiempo, los cogollos suelen estar expuestos a ambientes que afectan al perfil de terpenos.
Los terpenos no solo contribuyen al aroma y sabor únicos de cada variedad, sino que están directamente implicados en el efecto psicoactivo. Incluso se ha demostrado que algunos terpenos influyen en el sistema endocannabinoide (la misma red en la que inciden el THC y el CBD), y la teoría del efecto séquito postula que estos compuestos aromáticos podrían amplificar los efectos de determinados cannabinoides.
Congelar la hierba minimiza la exposición a condiciones que alteran el perfil fitoquímico de los cogollos de cannabis. Cosechar las flores y meterlas rápidamente en un congelador protege estas valiosas sustancias químicas antes de la extracción.
Introducción al live resin y al rosin
La resina viva y el rosin vivo son extractos de cannabis que se pueden dabbear, vaporizar o añadir a los comestibles. Algunos fumadores también los mezclan con hierba en los porros. Estos productos se denominan “vivos” porque proceden de hierba fresca congelada. Este nombre indica su “frescura” y el proceso utilizado para crearlos.
Los técnicos crean live resin utilizando disolventes hidrocarburos como el propano y el butano. Tras la extracción, el disolvente se purga del extracto para evitar la contaminación residual. El live rosin, por otro lado, se crea mediante un proceso sin disolventes que conlleva un calor y una presión relativamente bajos.
¿Qué se necesita para congelar hierba fresca?
Pasarse a la hierba fresca congelada no requiere mucho trabajo ni mucho material. En cualquier casa existe todo lo necesario para llevar a cabo la instalación más básica. Sin embargo, tienes la opción de invertir en algunos accesorios adicionales para obtener los mejores resultados posibles. Echa un vistazo a lo que necesitarás a continuación:
🍁 Cogollos recién cosechados: utiliza los cogollos más frescos que puedas. Lo ideal es congelar las flores el mismo día de la cosecha.
✂️ Tijeras: necesitarás unas tijeras para cortar los cogollos de las plantas y las hojas de azúcar. Puedes utilizar unas tijeras que tengas en el cajón de la cocina o unas tijeras de podar curvadas que ofrecen una ventaja ergonómica.
🧊 Congelador: puede que tengas que tirar esos guisantes que llevas tres años pensando en comerte para hacer sitio a la hierba. Aquí no necesitas nada especial, salvo que pienses congelar montones de cogollos.
🛍️ Bolsas de plástico: antes de meter los cogollos en el congelador, tendrás que colocarlos en bolsas de plástico aptas para alimentos.
📠 Envasadora al vacío (opcional): no es necesario que envases tus flores al vacío antes de congelarlas, pero sin duda puede ayudar. Estas máquinas aspiran el aire de las bolsas, lo que te permite meter más hierba en un espacio más pequeño y eliminar el oxígeno, otra variable que provoca la degradación de los terpenos.
¿Qué tipo de hierba deberías congelar?
Puedes utilizar cualquier tipo de flor de cannabis durante este proceso. Todo depende de los fitoquímicos que quieras en tu extracto. Elige cuidadosamente los niveles de THC, CBD y terpenos. Por supuesto, también deberías usar solo cogollos sin moho, sin residuos de pesticidas y cultivados de la mejor manera posible.
Cómo cosechar antes de congelar la hierba
Ve rápido y con cuidado. Para conseguir los mejores resultados, tienes que sacar los cogollos de la planta, recortarlos y guardarlos en el congelador en cuestión de horas. Así que sírvete una taza de café recién hecho, ponte un podcast, hazte un porro y ¡manos a la obra! Eso sí, no dejes que la velocidad te vuelva torpe. Manipula las flores con delicadeza para evitar aplastarlas y desprender los tricomas.
Cómo congelar hierba
Ahora que ya conoces los beneficios de la hierba fresca congelada, ¡vamos a guiarte a través del proceso! Sigue los siguientes pasos para mantener tus terpenos frescos.
Paso 1: Cosecha con cuidado
¡Ha llegado el día de la cosecha! Despeja tu agenda para las próximas horas. Utiliza unas tijeras para desprender los cogollos de las ramas y colócalos en una bandeja de recogida. Recuerda manipular las flores con cuidado para mantener los tricomas intactos. Procura manipularlas por los tallos para evitar mancharte las manos y quitarles la valiosa resina. Un par de guantes de usar y tirar también son útiles en este caso.
Paso 2: Empieza a recortar
Una vez que hayas deshojado tus plantas, recorta las hojas de azúcar sobre otro recipiente vacío para recogerlas y utilizarlas más adelante. Plantéate la posibilidad de hacer kief, o incluso un té con hojas de azúcar.
Paso 3: Embolsa tus cogollos
Una vez recortados, tendrás que guardar tus cogollos en bolsas. Si optas por bolsas aptas para uso alimentario, llénalas hasta el 75% de su capacidad. Saca todo el aire que puedas sin aplastar las flores. A continuación, cierra cada bolsa con un clip o un nudo. También puedes utilizar una envasadora al vacío.
Paso 4: Meter en el congelador
Ya casi has terminado. Ahora que tus cogollos están bien empaquetados, simplemente colócalos en el congelador a unos -18°C.
Paso 5: Espera con paciencia
¡Has completado con éxito el proceso de congelar hierba fresca! Ahora solo tienes que esperar el tiempo suficiente para que se congelen por completo. Resiste la tentación de abrir el congelador; deja que pasen al menos 24 horas.
Cómo usar la hierba fresca congelada
Tienes dos opciones principales a la hora de procesar tu hierba fresca congelada en casa: hacer live resin o live rosin. Dado que la resina viva requiere un proceso de extracción con hidrocarburos y circuito cerrado, la mayoría de cultivadores caseros optan por el live rosin. Puedes hacer este extracto usando simplemente una plancha de pelo y un trozo de papel de horno. Sin embargo, no puedes prensar cogollos congelados. Tendrás que hacer un lote de bubble hash antes de calentar la plancha.
Cosas que debes evitar al congelar hierba fresca
Preparar y utilizar hierba fresca congelada parece sencillo, ¿verdad? Aunque esto es cierto, si no tienes cuidado durante este proceso las cosas pueden salir mal. Evita los siguientes errores para garantizar el éxito.
- No agites las flores congeladas: intenta no sacudir ni dejar caer las bolsas de hierba congelada cuando las saques del congelador, ¡los tricomas son estructuras delicadas!
- No dejes los cogollos al aire: saca los cogollos del congelador solo cuando vayas a utilizarlos inmediatamente. Dejarlos descongelar demasiado tiempo a temperatura ambiente los expondrá a las variables de las que intentas protegerlos.
- No prenses hierba fresca congelada: tienes que hacer bubble hash con tu hierba congelada antes de prensar nada. Al fin y al cabo, está llena de agua.
- Cuidado con los agujeros en las bolsas de vacío: un pequeño agujero en las bolsas de vacío expone los cogollos al oxígeno. Revisa tus bolsas antes de utilizarlas.
Colócate con hierba congelada
Ahora que conoces las ventajas de la hierba fresca congelada y cómo utilizarla, solo te queda una pregunta: ¿meterás tus cogollos frescos junto a tus pizzas y guisantes congelados? No es para todo el mundo, pero con la hierba congelada se consiguen algunos de los mejores extractos de cannabis que existen. Así que, ¿por qué no intentarlo?