.
Marihuana contaminada: identificación y posibles peligros
Es muy habitual que la marihuana esté contaminada, y puede ser relativamente inocua o extremadamente peligrosa. Por tanto, es importante conocer los posibles tipos de contaminantes que puede llevar el cannabis, cómo detectarlos y qué hacer al respecto. Descubre todo lo que necesitas saber en nuestra guía sobre la marihuana contaminada.
Lamentablemente, la mayor parte de la marihuana que compras está contaminada de una forma u otra. Tanto si es legal como ilegal, probablemente lleve compuestos que no querrás consumir. Todos ellos suponen algún peligro, y algunos pueden ser letales.
En este artículo, exploramos los distintos tipos de contaminación del cannabis y qué puedes hacer al respecto, en caso de poder hacer algo.
Índice:
¿Qué es la marihuana contaminada?
La marihuana contaminada es la que contiene cualquier elemento que no se encuentre de forma natural en la planta de cannabis. Normalmente, la palabra “contaminación” nos hace pensar en sustancias químicas tóxicas o enfermedades muy peligrosas, pero el cannabis contaminado podría ser simplemente unos cogollos cubiertos de polvo; aunque también podría tratarse de cogollos contaminados de forma accidental o intencionada con algo más dañino.
A menudo, el cannabis contaminado es el resultado de malas prácticas a la hora de cultivarlo, procesarlo y almacenarlo, pero a veces también es consecuencia de que la gente intente que sus cogollos sean más brillantes o potentes de lo que realmente son. Por otro lado, la contaminación podría deberse a la presencia de algún organismo, como por ejemplo un hongo.
Algunos tipos de contaminación pueden verse a simple vista, por lo que es fácil decidir qué hacer al respecto. Pero otros tipos, incluidos algunos de los más peligrosos, no son visibles al ojo humano y podría ser necesario hacer un análisis en un laboratorio para detectarlos.
¿Es peligrosa la marihuana contaminada?
Depende del tipo de contaminación. Como mínimo, la contaminación reducirá la calidad del cannabis, e incluso los contaminantes menos dañinos pueden suponer cierto peligro y malestar si se consumen en grandes cantidades.
Otros contaminantes, como las esporas de hongos y las sustancias químicas tóxicas, pueden ser extremadamente peligrosos y en algunas ocasiones pueden llegar a ser mortales. Además, muchos contaminantes pueden ser cancerígenos. Y aunque algunos métodos para consumir cannabis (como fumar) son cancerígenos de por sí, igualmente conviene reducir los riesgos en la medida de lo posible.
Incluso se ha demostrado que la marihuana contaminada con disruptores endocrinos puede causar problemas de fertilidad[1]. Por último, a veces se añade THC sintético u opioides al cannabis para que parezca más potente; estas sustancias son sumamente potentes y pueden provocar efectos secundarios perjudiciales, además de ser muy adictivas.
Por tanto, lo mejor es consumir marihuana que no esté contaminada. En la mayoría de casos, la contaminación probablemente no te cause más que un simple dolor en el pecho. Pero las consecuencias podrían ser mucho peores, por lo que no vale la pena arriesgarse.
Causas de la contaminación del cannabis
Conocer las posibles causas de la contaminación del cannabis puede ayudarte a evitarla, hasta cierto punto. Tanto si se trata de evitar la contaminación en tu propio cultivo, como de evitar comprar marihuana contaminada, ¡el conocimiento es poder!
Infección fúngica
Los cogollos son susceptibles a las infecciones fúngicas, tanto durante el cultivo como durante el secado y curado. Si los hongos se desarrollan hasta el punto de poder verlos a simple vista, será evidente que los cogollos se han echado a perder. Sin embargo, podría ocurrir que los hongos se hayan desarrollado poco y no se aprecien a simple vista, por lo que podrías consumir los cogollos sin darte cuenta.
Un apunte importante: fumar cogollos infectados con esporas fúngicas es peligroso, pero vapearlos tiene muchas más posibilidades de causar daños. Según un estudio, vapear esporas fúngicas incluso en pequeñas cantidades puede provocar neumonía fúngica[1]. Así que, si vapeas cogollos, ten mucho cuidado con la contaminación.
- Mildiu polvoroso: el mildiu polvoroso engloba varias especies de hongos que pueden crecer en los cogollos y, como su nombre indica, crean una capa con aspecto de polvo. Al inhalar estas esporas (en grandes cantidades), se corre el riesgo de que se formen bolas de moho en los pulmones, lo que requiere cirugía para extirparlas.
- Botritis: la botritis es un moho gris muy habitual en los cultivos de marihuana y que también puede crecer en la fruta y verdura en descomposición. Probablemente lo habrás visto alguna vez. En la mayoría de casos, este moho no supone un riesgo importante, pero puede provocar reacciones alérgicas en algunas personas.
- Aspergillus (productor de micotoxinas): este moho puede causar aspergilosis en personas que ya padecen afecciones pulmonares, aunque no suele afectar a personas sanas. Contiene micotoxinas, cuya inhalación puede causar enfermedades agudas y crónicas. También contiene aflatoxinas, que son cancerígenas y mutágenas.
- Penicillium: este moho puede provocar reacciones alérgicas en algunas personas, con síntomas similares a la alergia al polen.
Infección bacteriana
El moho no es el único organismo que puede contaminar los cogollos; también están las bacterias. Pero dado que no producen esporas, las bacterias a menudo se destruyen al fumar, por lo que no conllevan los mismos riesgos que los hongos. Dicho esto, manipular y consumir marihuana infectada podría transferir bacterias a tu boca por vías distintas a la inhalación, por lo que aun así puede ser peligrosa.
- Salmonella: esta conocida bacteria suele contaminar los alimentos, causando intoxicaciones alimentarias leves o graves. También puede alojarse en el cannabis y podría tener los mismos efectos si manipulas cogollos contaminados y después te tocas la boca o los alimentos.
- Enterobacter: esta bacteria puede causar infecciones respiratorias, que si no reciben tratamiento pueden resultar peligrosas. Si das caladas a un porro con marihuana contaminada, existe el peligro de que inhales bacterias vivas y te infectes.
- Estreptococos: esta bacteria puede causar infecciones que requieren antibióticos. Los síntomas pueden variar de leves a graves.
- Klebsiella: puede causar infecciones intestinales y pulmonares, y es responsable de aproximadamente una décima parte de los casos de neumonía en los hospitales. Es peligrosa tanto al inhalarla como al ingerirla.
Metales pesados
Los metales pesados están presentes en toda la naturaleza. En concentraciones bajas suelen ser inocuos, pero en grandes concentraciones pueden ser mortales. Algunos fertilizantes contienen metales pesados, que se van acumulando a lo largo del ciclo de vida de una planta de cannabis hasta alcanzar niveles peligrosos a la hora de cosechar los cogollos.
- Cadmio: el cadmio es cancerígeno y también puede debilitar los huesos y dañar los riñones, entre otros problemas. Es una toxina que se encuentra habitualmente en el humo y es muy peligrosa.
- Arsénico: la intoxicación causada por este conocido metal pesado provoca síntomas que incluyen vómitos, diarrea acuosa con sangre, encefalopatía, dolor abdominal y muerte.
- Plomo: la intoxicación por plomo produce una serie de síntomas desagradables, como dolor abdominal, estreñimiento, dolores de cabeza, irritabilidad, problemas de memoria, infertilidad y hormigueo en pies y manos. También puede causar una discapacidad mental grave e irreversible, y es responsable del 10% de las discapacidades mentales de causa desconocida.
Plaguicidas
Los pesticidas se usan habitualmente en la agricultura y también se usan en el sector del cannabis (legal e ilegal). A menudo, estos productos permanecen en los cogollos que luego son consumidos por la gente, lo que supone una serie de peligros. Un estudio reveló que el 84% de los productos legales de cannabis en Washington contenían pesticidas[1].
Algunos pesticidas son cancerígenos, y también pueden ser disruptores endocrinos y toxinas neurológicas.
- Carbaril: este insecticida es muy tóxico y está clasificado como cancerígeno. Es peligroso fumarlo, vapearlo o ingerirlo.
- Permetrina: este pesticida puede causar reacciones alérgicas en la piel y los pulmones, y podría ser muy peligroso para algunas personas.
- Propargita: aunque no se considera extremadamente peligroso para los humanos (al menos en cantidades determinadas), puede irritar seriamente los ojos, la nariz y la boca.
Suciedad y residuos orgánicos
Los cogollos pueden acumular suciedad y residuos orgánicos durante el cultivo, el secado, el transporte o el almacenamiento. Este tipo de contaminación suele ser el menos peligroso, pero en algunas personas puede irritar los pulmones o provocar reacciones alérgicas.
- Polvo y suciedad: si no se manipulan y almacenan correctamente, los cogollos pueden acumular polvo y suciedad; a fin de cuentas, son muy pegajosos. Esto es inevitable en pequeñas cantidades, pero debería reducirse al mínimo.
- Excrementos de insectos: la marihuana cultivada en interior no debería contener prácticamente nada de excrementos de insectos, mientras que la cultivada al aire libre probablemente contenga algunos. No está claro si su presencia supone un peligro, pero seguramente no te apetezca averiguarlo.
- Telarañas de arañas y ácaros araña: las plantas de cannabis pueden cubrirse de telarañas formadas por arañas o ácaros araña. En pequeñas cantidades no debería ser un peligro, pero si los cogollos están muy cubiertos de telarañas podrían irritar los pulmones o causar una reacción alérgica. Los cultivadores deben quitar las telarañas de sus cogollos antes de consumirlos.
- Excrementos de pájaros: si las plantas crecen al aire libre, los pájaros podrían defecar sobre ellas. Aunque se desconocen los riesgos para la salud de fumar cogollos con excrementos de pájaros, es mejor evitarlo. Si te venden marihuana cubierta de caca de pájaro, ¡el vendedor es un vago!
- Insectos vivos y muertos: en los cogollos también puede haber insectos muertos o vivos. Aunque en la mayoría de casos probablemente no supongan ningún peligro, podría ser desagradable encontrar bichos en tus cogollos.
- Huevos de insectos: asimismo, también podría haber huevos de insectos en los cogollos. Tampoco son peligrosos, pero podrían resultar desagradables.
Drogas o fármacos
Algunos vendedores de marihuana ilegal rocían sus cogollos con otras drogas o fármacos, por lo que la marihuana contiene drogas activas, además de los cannabinoides naturalmente presentes. Normalmente, esto se hace para que la hierba parezca más potente de lo que es en realidad.
A menudo se usan cannabinoides sintéticos, que pueden ser muy peligrosos. Recientemente, en los EE.UU. ha surgido una tendencia de mezclar el cannabis con fentanilo. Esto es más peligroso que los cannabinoides sintéticos, ya que el fentanilo es un opioide extremadamente potente, que incluso en cantidades muy pequeñas puede causar una sobredosis y la muerte.
Señales de que la marihuana está contaminada
Puede que te estés preguntando: “¿qué aspecto tiene la marihuana contaminada?”
Muchos de los peores tipos de contaminación no pueden verse a simple vista y requieren análisis de laboratorio. Pero algunos sí son visibles y puedes identificarlos con la vista y el olfato.
Señales visibles de contaminación en los cogollos
En la siguiente lista encontrarás algunos indicios claros de que tu hierba está contaminada. En cada tipo de contaminación se indica si puede limpiarse o no.
- Excrementos de insectos: si ves pequeños excrementos de insectos (de color marrón claro u oscuro) en tus cogollos, entonces están contaminados. ¡Pero puedes limpiarlos!
- Suciedad y polvo: si la marihuana está sucia o polvorienta, deberías poder verlo a simple vista. Es posible limpiarla.
- Hifas o filamentos de hongos: las hifas de los hongos tienen un aspecto fino y posiblemente polvoriento, y pueden ser muy abundantes. No debes consumir los cogollos que tengan filamentos fúngicos.
- Necrosis bacteriana: si parte del cogollo se ha vuelto de color gris, negro o marrón, y está húmedo y podrido, lo más probable es que esté siendo consumido por bacterias, por lo que deberías desecharlo.
- Olor a humedad: si la hierba huele a humedad, probablemente esté contaminada por hongos y deberías desecharla.
- Olor químico: a veces, puede ser difícil distinguir este olor del aroma de los terpenos. Si tu hierba huele a productos químicos sintéticos, podría estar cubierta de pesticidas o de algún otro producto químico. Dependiendo de la sustancia en cuestión, puede que sea posible quitarla o no; pero sin un análisis de laboratorio para identificarla, tendrás que asumir que no se puede y deshacerte de los cogollos.
- Textura seca/calcárea: algunos mohos tienen una textura seca y calcárea, parecida al polvo. Estos cogollos no pueden limpiarse y deben desecharse.
- Residuos de aceite y ceniza negra dura: si encuentras este tipo de contaminación en tu cannabis, tendrás que tirarlo.
- Residuos arenosos/polvorientos en el envoltorio: esto puede tener varias causas. Tendrás que deshacerte del cannabis, ya que no es seguro que la limpieza funcione.
Señales invisibles de contaminación en los cogollos
La mayoría del resto de contaminantes, especialmente los productos químicos, son imposibles de detectar con la vista o el olfato. Por tanto, es necesario realizar análisis para detectarlos, normalmente en un laboratorio.
A continuación se indican algunos métodos para detectar la contaminación. Aparte de los análisis de drogas, por lo general no es posible realizar estos análisis en casa:
- Cromatografía líquida: pesticidas
- Cromatografía de gases: pesticidas
- Espectrometría de masas con plasma de acoplamiento inductivo: metales pesados
- Kits de análisis de drogas
Cómo evitar la marihuana contaminada
Hay varias formas para evitar o reducir las posibilidades de consumir marihuana contaminada. Pero, salvo que cultives tu propia hierba, no podrás estar completamente seguro/a. Aquí tienes algunos consejos:
- Compra en coffeeshops y clubs de cannabis de confianza: pide información sobre los análisis de los lotes de cannabis, que demuestran que los cogollos de un mismo lote están “limpios”. Pregunta al personal del establecimiento a quién compran y qué prácticas emplean los cultivadores. La marihuana comprada de forma legal no implica necesariamente que esté libre de contaminación.
- Cultiva tu propia hierba: ¡la mejor forma de evitar la contaminación es cultivar tu propia hierba! De este modo, sabrás exactamente qué llevan tus cogollos y estarás en control de la situación.
- Evita comprar en la calle: por lo general, los camellos de la calle no saben qué contiene su marihuana, salvo que la cultiven ellos mismos. Si compras a un proveedor de confianza que cultiva su propia hierba, no hay problema. Pero el mercado ilegal está repleto de marihuana contaminada.
- inspecciona visualmente los cogollos: aunque este método no es infalible, deberías inspeccionar visualmente la marihuana antes de comprarla. Esto no te salvará de todos los tipos de contaminación, pero puede ayudarte a detectar algunos de los signos más evidentes.
Cómo tratar la marihuana contaminada
Aunque es posible limpiar algunos tipos de contaminación del cannabis, lo mejor es que te deshagas de los cogollos si crees que están contaminados. ¡No pongas en riesgo tu salud!
Pero si quieres consumirlos, entonces debes intentar hacerlo de forma más segura y aplicar algunos métodos para mitigar los daños.
- Lava los cogollos: lavar la marihuana puede, como mínimo, eliminar la suciedad y los residuos.
- Usa pipas de agua: algunas evidencias sugieren que la filtración del agua podría atrapar algunos contaminantes[1], aunque las pruebas científicas al respecto son poco concluyentes.
- Irradiar la marihuana: irradiar los cogollos eliminará el moho y las bacterias. Este método se usa normalmente para esterilizar el material quirúrgico y probablemente esté fuera del alcance de la mayoría de gente.
Marihuana contaminada: un posible peligro para la salud
Es muy habitual que el cannabis esté contaminado. De hecho, puede que la mayor parte de la marihuana esté contaminada de una forma u otra. Aunque todos los tipos de contaminación conllevan algún riesgo, hay que evitar especialmente la contaminación por productos químicos, drogas, fármacos, moho y bacterias, ya que pueden causar graves problemas de salud.
Si crees que tus cogollos están contaminados, lo mejor es deshacerte de ellos. Es preferible no colocarse antes que enfermar o sentirse fatal, así que ve sobre seguro y no los fumes.
- Cannabis contaminants: sources, distribution, human toxicity and pharmacologic effects - PMC https://www.ncbi.nlm.nih.gov