Auge y caída de MedMen

MedMen fue, durante un tiempo, una marca destacada y muy respetada de la industria legal del cannabis en EE.UU., que temporalmente fue conocida como la “tienda Apple de la hierba”; antes de recibir el apodo menos halagador de “DeadMen”. Esta alusión a la muerte resultó ser un presagio de su destino, dado que, lamentablemente, esta empresa ya no existe.

La comparación con Apple no era casualidad, ya que reflejaba la visión audaz y orientada al cliente de MedMen. Sus tiendas ofrecían una experiencia de compra premium que estableció un nuevo estándar en el comercio minorista de cannabis, y ofrecía una imagen de cómo podría ser el futuro de la hierba. Sin embargo, a pesar de su éxito inicial, la trayectoria de MedMen dio un giro drástico y devastador que les condujo a la inestabilidad financiera, problemas administrativos y la quiebra, convirtiendo a la empresa líder del sector en un ejemplo aleccionador.

En este artículo echamos un vistazo a la turbulenta historia de MedMen, repasamos lo que sucedió y analizamos lo que podría decirnos sobre el futuro de la industria legal del cannabis.

¿Quiénes eran MedMen?

Fundada en 2010 por Adam Bierman y Andrew Modlin, MedMen destacó en el incipiente mercado legal del cannabis por su elegante branding y sus dispensarios de lujo. Al mismo tiempo, se distanció de los estereotipos sobre la marihuana y sus consumidores. Bierman y Modlin no dudaron en manifestar su atrevida visión del sector del cannabis, y durante un tiempo tuvo mucho éxito, lo que hizo que alcanzara una valoración de 3.000 millones de dólares.

El enfoque contemporáneo de esta empresa sobre el comercio minorista de marihuana tenía como objetivo normalizar la sustancia, hacer que su compra fuera algo habitual, y posicionarla bajo una nueva luz como una planta aceptable y deseable con una gran cantidad de beneficios para el mundo moderno. Ubicados en lugares privilegiados y tolerantes con la hierba como Venice Beach en California, la Quinta Avenida de Nueva York y cerca del Strip de Las Vegas, los dispensarios de MedMen vendían una gran variedad de productos de cannabis, desde cogollos hasta comestibles y concentrados, en un ambiente moderno y convencional.

El objetivo de todo esto era cambiar la percepción del cannabis, atraer a una base de clientes más diversa y, en última instancia, ganar dinero. Al principio todo parecía muy prometedor, pero no pudo ser.

¿Por qué fracasó MedMen?

El cambio de una rápida expansión a las dificultades financieras comenzó de forma sutil, pero con el tiempo tomó impulso hasta que acabó por descontrolarse totalmente. MedMen salió por primera vez al mercado público en 2018, ocho años después de su creación, con acciones de poco más de 3 dólares, cuyo valor duplicaron rápidamente los inversores. Durante un breve momento, parecía que iba a tener un futuro brillante.

Sin embargo, la expansión fue muy cara y a la larga resultó insostenible. La empresa asumió una deuda importante que ascendía a cientos de millones de dólares. Incluso intentó llevar a cabo una fusión con PharmaCann que ascendía a 682 millones de dólares, y que finalmente se vino abajo debido al escrutinio antimonopolio del Departamento de Justicia. Esto les atestó un golpe del que nunca se recuperarían.

El 23 de abril de 2024, los problemas financieros de MedMen llegaron a su fin cuando la empresa se declaró en bancarrota. Este evento fue el resultado de continuos problemas de liquidez exacerbados por los altos costes operativos, la presión competitiva de vendedores sin licencia, y un entorno de mercado implacable que empeoró con las preocupaciones sobre la regulación del vapeo.

El peor escenario posible

El fracaso de MedMen se puede atribuir a una combinación de malas decisiones y desafíos externos; los cuales no todos fueron culpa suya.

Adam Bierman, uno de los dos cofundadores, se vio obligado a dimitir en medio de varias polémicas, entre las cuales se incluyen acusaciones de racismo y una mala gestión financiera, que empañaron la reputación de la empresa y espantaron tanto a inversores como a clientes. Además, el mercado legal de cannabis en su conjunto se enfrentó a problemas regulatorios inesperados y al consiguiente escepticismo de los inversores debido a los avances de la salud pública. Hubo, por ejemplo, problemas con cartuchos de vapeo peligrosos, lo que provocó una mayor vigilancia y presión regulatoria, y perjudicó a gran parte del marketing centrado en el bienestar del que depende el éxito del sector.

A pesar de un avance efímero durante la pandemia del COVID-19, la empresa no pudo superar sus cargas financieras. Incluso antes de la pandemia, en 2019, las acciones de MedMen se habían desplomado perdiendo el 92% de su valor, una caída de la que nunca se recuperaron. Al final, la compañía reveló más de $400 millones en pasivos en su declaración de bancarrota, lo que dejaba más que clara su terrible situación.

¿Cómo afecta la desaparición de MedMen al sector del cannabis en general?

El dramático ascenso y caída de MedMen plantea algunas preguntas importantes sobre la sostenibilidad de una rápida expansión en la industria legal del cannabis, que todavía está evolucionando. El destino de esta empresa nos sirve como advertencia de los peligros del endeudamiento excesivo y de la importancia de una buena gestión financiera y operativa.

Aunque no hay duda de que la industria del cannabis está creciendo, operar en un entorno que cambia tan rápidamente y tiene una regulación inconsistente plantea serios riesgos. De hecho, lo que hemos aprendido es que las empresas relacionadas con el cannabis necesitan dar pequeños pasos en lo que respecta a asumir riesgos, ya que el futuro es difícil de predecir, y los avances repentinos en una industria tan volátil y estigmatizada pueden conducir al fracaso.

Sin embargo, la historia de MedMen también es una historia de ambición imprudente, y podría aplicarse a cualquier negocio, esté o no relacionado con la marihuana. Tratar de dominar el mercado rápidamente puede dar frutos para unas pocas empresas afortunadas, pero también puede resultar en una estrepitosa implosión.

Adiós a MedMen

¿Qué hemos aprendido de la desaparición de MedMen? Es arriesgado sacar demasiadas conclusiones del fracaso de una sola empresa, pero esta desafortunada historia nos informa de dos cosas: la primera, que el sector del cannabis es volátil y arriesgado; y la segunda, que un crecimiento rápido no siempre es bueno.

A pesar de la mala suerte de esta empresa y de su trayectoria, hay muchas otras relacionadas con la marihuana que siguen prosperando, incluso en un momento en que las perspectivas en torno a la economía mundial son bastante sombrías. Así que, aunque a este sector aún le quede un largo camino por recorrer, si vas con cuidado, puedes tener éxito.